Mensajes de diversas orígenes

 

sábado, 29 de julio de 2023

Reza por Mis Siervos Cuya Indiferencia Pone en Peligro sus Almas

Mensaje de Dios Padre a Su Amada Hija Linda en Long Island, Ny, Usa del 8 de Abril de 2023

 

Reza por nuestros sacerdotes y por los niños que están en el vientre de todas las madres. Sus muertes son una afrenta a Mis Ojos y no podéis vivir cuando os revestís de muerte.

Hijos amados, escuchadme. No os volváis complacientes. Es fácil para Mis Hijos Amados dormirse cuando el peligro está a la puerta. No descanséis en vuestros esfuerzos. ¡Rezad! Rezad siempre, porque oigo vuestras oraciones y son como canciones para Mí. Oigo vuestras oraciones y actúo con prontitud. Oh, Fe, Hijos Míos. Tened fe y creed en Mi Amor y en Mis planes para vosotros. ¿Qué padre no desea ver a Sus Amados Hijos sanos, felices y seguros? Yo soy el Padre Perfecto y Todo Mi Universo se mantiene en vosotros. Por eso, estoy sediento de vuestro Amor y atención. Sin embargo, Mis Hijos Amados Me abandonan. Me abandonan en Mi Amor y deseo extenderlo y llenar cada uno de vuestros Corazones con Mi Luz. Mi Amor os da nueva vida. No dudéis de Mí, Amados Míos.

Amadísimos Amores que Me negáis, venid a Mí. Volved a vuestro Creador Amoroso que os ha hecho del Amor, con Amor y para el Amor. Tú eres Mi Propósito. Estáis en Mí como Yo estoy en vosotros.

Hijos, no podéis permitiros esperar. Busco vuestra atención. Busco vuestra atención minuciosamente. Os llamo. Os envío mensajes. Os proporciono grandes glorias, pero soy negado, ignorado o recibo un Amor tibio e incierto. Oh Hijos, deseo que cada uno de vosotros Me comprenda y Me conozca . Mi Amor no es una tarea, ni algo que avergüence. Soy un Padre preocupado y cariñoso que llama a Sus Hijos hacia Él.

Hijos, os he susurrado y murmurado nombres. No me habéis oído. Os he llamado, aún más fuerte, y no habéis querido oír. Ahora rugiré, pero ¿seguiréis siendo sordos a Mi ruego? ¿Seguiré abandonado?

¿Qué hombre puede ver a un bebé llorando y no cogerlo en brazos para ponerlo a salvo, cuidarlo, protegerlo y velar por su salud y felicidad? Y si es tu propio hijo, ¿cuánto más atento estarás? Y Yo, tu Señor Dios, ¡Soy el padre perfecto! Conozco cada una de tus respiraciones, pues las he contado incluso antes de que existieras. Conozco cada mota de color de vuestros ojos y cada vena que recorre vuestros cuerpos.

Queridos míos, la vida puede ser una alegría sin límites, incluso en la tragedia. Podéis resistirlo todo si vuestra fe y creencia en Mí (son) plenas. Hijos, vuestra fe moverá montañas y haréis otros milagros para Glorificar Mi Nombre. Seréis Luces en este Mundo de Muerte. Guiaréis a los perdidos e iluminaréis las tinieblas. Sabed, pues, lo que amo y lo que no amo, lo que acepto y lo que no acepto.

Hijos, la apostasía de este mundo supera con creces la de cualquier otra época de la existencia del Hombre. Asesináis a inocentes en número incontable y no sentís ninguna lacra en vuestras Almas a causa de esta acción. Vuestros Corazones se han acostumbrado a la Muerte y al pecado de tal modo que ya no lo reconocéis cuando os enfrentáis incluso a los pecados más oscuros.

Hijos, os digo que no os volváis complacientes en vuestras oraciones. No podéis saber cuándo regresa vuestro Maestro. Por eso os digo que recéis. Rezad por Mis Siervos cuya indiferencia pone en peligro sus Almas.

Siervos Míos, Mis Discípulos Amados, no debéis extraviar a Mis Amados Hijos. Vuestras Almas, Mis Siervos, llevan una pesada carga y vuestras responsabilidades son graves. No despreciéis vuestro trabajo. Reponed vuestros Espíritus con Mi Amor. Fortaleceos con la oración constante. Redescubriréis la energía de vuestro primer Amor. Reexperimentaréis vuestro entusiasmo por el Espíritu Santo. Venid a Mí con el Corazón abierto y Yo os daré una nueva Vida. Siervos Míos, no debéis desviar a Mis Hijos. Hacerlo pone en peligro vuestra propia Alma y las consecuencias son graves.

Hijos de Mi Corazón, llega la Primavera, cuando los cielos están tranquilos y las hojas vuelven a crecer en Mis árboles y flores. Y en esta Primavera, conoceréis la paz antes de la tormenta. No os volváis decadentes ni excesivamente indulgentes porque tengáis en abundancia. Un día no tendréis, y lo que hoy considerabais basura será mañana una fiesta a vuestros ojos. [Esto no implicaba qué primavera, sólo «durante la primavera»].

Hijos, os he bendecido innumerables veces. He mirado con buenos ojos a la Señora del Mundo. Os he dejado prosperar y dar fruto. El vuestro ha sido un momento singular de luz y gloria. Os he Bendecido, pero apartáis vuestros rostros Amorosos de vuestro Señor Dios y Padre, y en su lugar llenáis vuestros brazos de muerte y maldad. Os habéis vuelto cómodos con el pecado, hasta el punto de excusarlo para salvaros del ridículo. Excusáis el pecado por miedo a los tiempos y a las consecuencias de la verdad. Transigís con el pecado en toda su maldad porque sois mundanos y no contempláis con oración vuestra vida después de la muerte. Sólo podéis conocer la Vida y el Amor verdaderos a través de Mi Hijo Amado, el Cristo Jesús. Cuando no Le conocéis, cuando no Le adoráis, no reconozco a los extraños y os apartaré. No transigáis con el pecado. No niegues tu Amor por Mí. Seréis probados de formas temibles, hijos Míos. No os digo esto para asustaros, sino para prepararos. Para mostraros cómo vuestra oración perdurable os da fuerza para soportar incluso aquello que más teméis.

Este Mundo no puede continuar por este camino destructivo. Mi Mayor deseo es tener Conmigo a cada Alma, a cada Hijo Amado. Anhelo tu Amor y anhelo tu atención. No podéis vivir en la oscuridad. Si insistís en apagar Mi Luz, os quedaréis ciegos cuando vuestros ojos se destapen. Para entonces, no Me reconoceréis ni a Mí ni a Mi Amor y bondad.

Hijos, rezad. Pierdo tantas Almas cada día a manos de Satanás. Mis Hijos no se dan cuenta de que hay repercusiones por el pecado, y si negáis Mi Amor y Misericordia, ¿cómo podré salvaros entonces? Hijos, no rechazaríais una libra de oro y, sin embargo, rechazáis Mi Amor que es inefablemente más precioso. Belovéds, os llamo una y otra vez. Conocedme. No esperéis. No esperéis. Os doy Mi Paz. La Paz.

Origen: ➥ gods-messages-for-us.com

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